Consejos para diseñar e imprimir trípticos originales
Consejos para diseñar e imprimir trípticos originales
Los trípticos siguen siendo una de las herramientas publicitarias más utilizadas por las empresas hoy en día. Y es que además de permitir incluir más información que los flyers, tarjetas y dípticos, ofrece una imagen mucho más profesional de nuestra marca a los clientes, lo que hace que destaquemos por encima de la competencia. Pero además, cuentan con la ventaja de que presentan un gran potencial de personalización, pues se puede elegir entre diferentes materiales, formas, colores y relieves. Lo cual es muy útil para llamar la atención del público al que va dirigido y evitar que nuestros folletos publicitarios terminen en la basura.
Un tríptico promocional cuenta con seis caras: la portada, la parte frontal interna, las tres caras que componen el folleto abierto y la contraportada. La portada es la clave para llamar la atención de los potenciales clientes, la parte frontal interna donde aprovecharemos para convencer al cliente, las caras del folleto abierto donde detallaremos las características del producto y la contraportada, donde incluiremos los datos de ubicación y de contacto de la empresa.
Es muy importante que sepamos optimizar al máximo los diferentes elementos, aprovechando cada cara y conjuntándolas correctamente. Teniendo en cuenta además a la hora de diseñarlo cuál es el público al que nos dirigimos y cuáles son los valores de nuestra marca. En función del objetivo del tríptico, podremos crear un folleto más formal o más informal. Puede que lo que estemos buscando es dar a conocer la marca, pero también podemos usarlos para promocionar un producto, servicio o evento en concreto. Con lo cual, deberemos tener en cuenta todos estos factores antes de diseñar e imprimir nuestros trípticos, de manera que sean más efectivos y consigan llamar la atención de nuestros potenciales clientes. A continuación te lo explicamos con más detalle:
Definición del mensaje
Lo primero que debemos hacer es decidir cuál es la idea principal del tríptico y, siempre que sea posible, hacerlo en base a un estudio de mercado.
Saber quién es nuestro público objetivo
Antes de establecer el diseño de un folleto publicitario, es muy importante tener en cuenta los factores sociológicos y demográficos, y los hábitos del público al que nos dirigimos. De esta forma, resultará mucho más fácil llamar su atención y no perderemos tanto tiempo y dinero en hacer llegar nuestro tríptico a personas que no están interesadas.
Contenido textual
Es importante no saturar todo el folleto de información, por lo que debemos elegir muy bien las palabras que incluimos. Así como la estructura y la organización de los textos para que exista una buena coherencia. La clave está en describir el producto con pocas palabras y relacionar la calidad que se ofrece con el nombre de la marca.
Tipo de fuente
Si nunca has imprimido trípticos, lo mejor es no experimentar y apostar por un tipo de letra clásico y sencillo. Es fundamental que los textos puedan leerse sin dificultad y que se entiendan rápidamente.
Otros elementos gráficos
En cuanto al fondo, las imágenes e ilustraciones que acompañarán a los textos, es muy importante que estos vayan en sintonía y que no saturemos las páginas de fotografías para que podamos incluir la información necesaria que el consumidor necesita saber.