¿Cuál es la resolución perfecta para imprimir imágenes de calidad?
Cuántas veces habremos oído hablar de la resolución de una imagen a nuestro impresor o a fotógrafos y diseñadores… Y muchas veces no tenemos claro a qué se refieren en un determinado contexto o qué sucede cuando un archivo tiene una resolución alta o baja…
Por eso en este artículo vamos a intentar explicar qué es la resolución de una imagen, en qué se mide y para qué sirve, y además desentrañaremos su importancia a la hora de preparar un proyecto para enviar a imprenta.
Entremos en materia… ¿Qué es la resolución de una imagen?
Resolución es un término que se usa habitualmente para determinar la cantidad de detalle que puede observar el ojo humano de una determinada imagen. En otras palabras, es el grado de detalle que presenta una imagen digital, ya sea esta escaneada, fotografiada o impresa.
Así, cuando una imagen tiene mayor resolución que otra, presenta mayor detalle visual. Justo por este motivo es muy importante conocer la resolución de cualquier imagen que enviemos a imprenta, o que forme parte de nuestros diseños y proyectos de impresión.
El valor de la resolución se expresa en ppp (píxeles por pulgada) o ppi en inglés (pixels per inch), pero no conviene confundirlos con los dpi (dots per inch), que se refieren a la resolución que puede dar una impresora. Parémonos un momento en este punto, que suele ser uno de los más confusos, y revisémoslo al detalle en el siguiente apartado.
Cuando una imagen tiene mayor resolución que otra presenta mayor detalle visual. / Fuente: Unsplash
Confusiones sobre la resolución de una imagen: ¿en pantalla o en imprenta?
Debemos aclarar que al hablar de resolución podemos estar refiriéndonos a tres elementos diferentes: la resolución de una imagen digital, la resolución de una imagen en pantalla, y la resolución de una imagen impresa (o la resolución de impresión).
- Así, la resolución de una imagen digital hace referencia al número de píxeles que contiene esa imagen a lo alto y a lo ancho, expresada en ppp. Para comprender esta relación vayamos a un valor habitual: una cámara con la que obtienes fotografías de 1600x1200 píxeles tiene una resolución de 1,92 megapíxeles (1600×1200=1.920.000 píxeles).
- Por otro lado está la resolución en pantalla, que también se expresa en ppp y oscila entre los 72 y los 93 ppp en nuestros monitores de casa o del trabajo.
- Y por último tenemos la resolución de impresión, de la que hablaremos en el siguiente apartado, y que se expresa en dpi (dots per inch o puntos por pulgada).
Si nos acercamos a cualquier cartel pensado para leer desde la distancia, observaremos los puntos de impresión a simple vista. / Fuente: Unsplash
¿Cuál es la resolución ideal para imprimir una determinada imagen?
En imprenta, a mayor dpi, mayor calidad. Lo ideal es enviar imágenes de 300 ppp en origen, así que conviene que te quedes con esta resolución estándar para preparar tus trabajos en los programas de edición o retoque fotográfico.
Sin embargo, para cada trabajo de impresión debemos tener en cuenta la resolución de imprenta ideal, y esta tendrá que ver con la distancia a la que se situará el objeto impreso. De hecho, la resolución de imprenta es inversamente proporcional a la distancia de visión. Así, cuanto mayor sea la distancia a la que se encuentre el ojo humano, menor debe ser la resolución, ya que nuestra capacidad de visión se verá limitada. De hecho, a 15 metros de distancia nuestro ojo solo distingue hasta 5 ppp.
Así, aunque los 300 dpi de los que hablábamos son un buen valor para revelar una fotografía de 15x20cm, por ejemplo, no tiene por qué ser ideales para imprimir un cartel en gran formato.
Lo más recomendable es confiar en tu impresor en este punto, pues conocerá el estándar para calcular la resolución de cada trabajo. Por ejemplo: si quieres colocar tu cartel impreso a 2 metros del público, el estándar está en los 38 dpi, y si lo quieres situar a 1 metro de distancia, con 76 dpi será suficiente. Sin embargo, si la distancia de visión es de solo 50 cm, la resolución en imprenta tendrá que subir hasta los 152 dpi, según este estándar. Podemos comprobar esto acercándonos a cualquier cartel de cualquier marquesina, para observar que desde una distancia muy pequeña somos capaces de apreciar los puntos de impresión a simple vista.
¿Cómo saber qué resolución tiene una imagen?
Ahora que sabemos que lo ideal es enviar imágenes a imprenta con una resolución de 300 ppp, puede que nos preguntemos ¿cómo saber qué resolución tienen mis imágenes? o ¿cómo modificar la resolución de una imagen determinada?
Pues para saber qué resolución tienen las imágenes con las que trabajamos o cómo modificar esa resolución el primer paso es abrir la imagen en un programa de edición y retoque fotográfico como Photoshop. Cuando abramos la imagen en Photoshop tendremos que seguir la secuencia Menú – Imagen – Tamaño de imagen para conocer qué resolución tiene la imagen de partida, y para poder modificarla.
Así, si queremos modificar la resolución de nuestra imagen, en el cuadro de diálogo tendremos que anular la selección de Remuestrear la imagen, porque así no alteraremos la cantidad de datos de la imagen, como vemos a continuación:
En la imagen A vemos la fotografía con sus dimensiones y resolución originales. En la B, sin embargo, se ha disminuido la resolución, sin modificar las dimensiones en píxeles (sin remuestreos). Y en la C se ha disminuido la resolución manteniendo el tamaño de documento, y se observa como han disminuido las dimensiones de los píxeles (remuestreo). Fuente: Adobe.com
Si deseas más información sobre cómo modificar el tamaño de una imagen en Photoshop, aquí te dejamos este enlace directo a su página de ayuda.
Entonces, ¿qué resolución uso en mis trabajos de imprenta?
Quedémonos con lo fundamental: si vas a enviar tus trabajos a imprenta, asegúrate de que todas las imágenes que incluyan los archivos estén a 300 ppp.
Además, aquí te dejamos un artículo sobre la importancia de la resolución en las impresiones, por si deseas ampliar información sobre la resolución ideal para conseguir una impresión de calidad.
Y si tienes dudas, habla directamente con tu impresor. En Soloimprenta.es estamos disponibles cuando lo desees, y te echaremos una mano en todo el proceso de impresión, desde el momento de diseñar y maquetar tus archivos, hasta el momento de imprimirlos con el mejor resultado en acabados y tiempo.