Diferencia entre CMYK y RGB
Cuando vas a enviar tus archivos a imprenta, debes fijarte en los modelos de color que se utilizan habitualmente en impresión. Aunque algunos cambios de color pueden ser casi imperceptibles entre el documento en el que trabajas y el documento impreso final, en algunos casos estos cambios pueden ser drásticos. Y no dejarás de notarlos cuando quieras lograr en tus trabajos un color especial o un tono o brillo determinado.
Aunque siempre podrás recurrir al asesoramiento y atención personalizada de tu impresor antes de enviar los documentos a imprenta, debes tener en cuenta qué acabado te ofrece cada modelo de color y para qué se utilizan.
¿Qué es CMYK?
El modelo CMYK es un modelo de color sustractivo utilizado en la impresión en color que presentar una muy buena adaptación a los medios industriales. Decimos que es un modelo de color sustractivo porque la mezcla de colores CMY ideales se crea en un proceso en el que se elimina o absorbe la luz, y si mezclamos los tres resulta el color negro, como ves en la imagen superior.
Es un modelo que se basa en la absorción de color de tal manera que un objeto puede aparecer, por ejemplo, de color magenta porque este color representa la parte de luz que incide sobre el objeto, es decir, que no es absorbida por este.
La impresión en CMYK, también conocida como cuatricromía o impresión a cuatro tintas, emplea los cuatro colores para producir diferentes tonos. La mezcla de los cuatro colores en diferentes proporciones da como resultado todos los colores del espectro visible.
Además del cian, el magenta y el amarillo, en la impresión a cuatro tintas es necesario utilizar el negro o Key. Esto es debido a que los tres colores combinados no producen un negro completamente saturado, es decir, no es un negro ideal y no quedará perfecto en una impresión de las páginas de un libro o folleto, por ejemplo.
Además, mezclar las tres tintas para producir el negro puede provocar que el papel se humedezca y provoque un problema en las impresiones de grandes tirajes, al no secarse suficientemente rápido para evitar que los documentos resultantes se contaminen entre sí. Además, el papel de baja calidad, como el de los periódicos o revistas, podría romperse si se humedece demasiado.
En cada impresión se suele emplear una cantidad de negro variable para reemplazar la proporción de las otras tintas, y esta cantidad se elige dependiendo de la tecnología de impresión, el tipo de papel, la clase de tinta usada y el acabado final que se quiera obtener. Cuando el negro se mezcla con otros tonos resulta un negro más denso, denominado “negro enriquecido”, “negro de registro” o “súper-negro”. Sin embargo, en impresión a cuatro tintas se recomienda evitar en la mayor parte de los procesos que utilicen un fondo blanco el negro enriquecido y optar por el K.
Usos del modelo CMYK
En el mundo del diseño, las artes gráficas y la impresión se ha extendido el uso del modelo CMYK porque genera un buen resultado, con mayor contraste y sin ninguna sorpresa.
Se usa en materiales impresos como carteles, folletos, flyers, tarjetas de visita… Los colores no aparecen tan brillantes como en el modelo RGB, que tiene la ventaja de una pantalla iluminada como veremos en las siguientes líneas, pero si vas a enviar algún archivo a imprenta, conviene que lo conviertas a CMYK si no lo has creado ya con este modelo de color, para que en el resultado final los colores sean los que has escogido.
¿Qué es RGB?
RGB, siglas en inglés de Red, Green, Blue (rojo, verde y azul), es un modelo de color aditivo, usado habitualmente en monitores de ordenador y otras pantallas. Suelen ser colores más luminosos, ya que este modelo tiene un espectro más amplio que el CMYK y, como decíamos unas líneas atrás, además de otros factores, el brillo de la pantalla comparado con el de un material opaco ofrece una diferencia importante.
Usos del modelo RGB
Es un modelo de color aditivo porque se obtiene por una mezcla de los tres colores de luz primarios, el rojo, el verde y el azul. La suma de las tres da como resultado la luz blanca.
Los mismos valores RGB pueden mostrar colores muy diferentes en función del dispositivo porque, aunque utilicen un mismo modelo de color, sus espacios de color pueden variar considerablemente. De hecho, en los materiales impresos, esta combinación de luz no puede ser reproducida directamente, por lo que las imágenes generadas en programas de diseño, edición o retoque fotográfico en RGB deben convertirse al equivalente en el modelo CMYK, el adecuado para utilizar en una impresora digital o máquina offset.
Utilizan el modelo RGB las aplicaciones móviles, las páginas web, los blogs… etc.
Diferencia entre CMYK y RGB en la impresión
La diferencia entre ambos modelos de color es fundamental en el mundo de las artes gráficas, desde el diseño, la maquetación, el retoque fotográfico, la ilustración… hasta la impresión.
Pero para un impresor esta diferencia es esencial, porque no puede procesar imágenes que no estén en CMYK. Todas las imprentas del mundo imprimen en CMYK, y cuando no logran un tono de color específico y demandado por el cliente (para obtener, por ejemplo, el tono exacto de un logotipo o imagotipo), pueden optar por tintas planas especiales, usando para ello la escala Pantone. Por este motivo, antes de enviar un trabajo a imprenta debes convertir los valores del documento a CMYK para que los colores de impresión sean lo más correctos posibles y el impresor pueda procesarlos.
Las imprentas offset utilizan las cuatro tintas básicas para construir el color en su trabajo diario. Para poder “separar la imagen” en diferentes planchas, con las que luego trabajarán en la máquina offset, necesitan que esta imagen contenga información en modo CMYK. Si la imprenta recibe una imagen en un modo de color distinto al CMYK, tendrá que convertirla para trabajar, y esta conversión ha de hacerse con los perfiles de color adecuados para que la impresión sea correcta y esté perfecta para el cliente.
La impresión digital puede seguir utilizando CMYK, pero en vez de planchas utiliza tóner o chorro de tinta. En este proceso de impresión, todos los colores se aplican a la vez, no con el método de rodillo del offset. Suele ser un proceso más rápido y con el que también se obtienen acabados perfectos para el cliente.
Qué es el sistema de color Pantone
El sistema Pantone o Pantone Matching System (PMS) es un sistema creado en los 60 por una empresa del mismo nombre con sede en Canadá para identificar, comparar y comunicar el color en las artes gráficas y que actualmente funciona como una estructura estandarizada de igualación del color a nivel internacional.
Pantone utiliza un sistema de numeración que identifica cada color de manera rápida y precisa, haciendo posible recrear de manera exacta ese color. Utilizando este sistema puedes hacer coincidir exactamente los materiales creados con sus correspondientes colores en RGB o CMYK, asegurando que el color se va a ver igual cada vez que se reproduzca. Funciona como las cartas de colores que nos muestran cuando vamos a seleccionar un color para pintar nuestra casa o para tapizar el sofá.
Aunque es un sistema que fue inicialmente diseñado para la industria gráfica, actualmente es una paleta muy utilizada en diferentes industrias.
Normalmente se utilizan para hacer coincidir con precisión los colores de tu imagen y la imagen que recibirá el impresor y que podrá estampar en diferentes productos, desde telas a lona, con idénticos resultados. Es ideal para mantener los colores exactos de la imagen de marca, por ejemplo, para hacer coincidir los colores exactos en cada material.
Tips básicos para convertir tus fotos a CMYK
1. Para convertir tus fotos a CMYK en Photoshop debes configurar el espacio de trabajo que te aparecerá por defecto al abrir la imagen con el programa. Para ello abre Vista-Ajuste de prueba-A medida…
2. Te aparecerá la siguiente ventana, donde debes elegir como espacio de trabajo Coated FOGRA39 (ISO 12647-2:2004). Acepta y define así el espacio de color.
3. Una vez definido el espacio de color, pasa la imagen con la que vas a trabajar a CMYK en Imagen-Modo-CMYK.
4. Al terminar, guarda y ya podrás utilizar esta imagen para impresión Offset.
Confía en tu imprenta profesional
Aunque encontrarás diferentes opiniones sobre el manejo del color en los programas de diseño gráfico y retoque fotográfico, si confías en una imprenta profesional no tendrás ningún problema con tus impresiones. Siempre que tengas dudas, puedes comunicarte con tu impresor y buscar el asesoramiento profesional que necesitas en cada momento.
En Soloimprenta.es te ofrecemos asesoramiento personalizado y respuestas rápidas a cada una de tus consultas. Siempre estamos disponibles si necesitas que te echemos una mano en la preparación de tus archivos. Además, disponemos de un servicio gratuito de revisión básica de archivos que cumplirá todas tus expectativas.