¿Qué es el grosor y el gramaje del papel?
El grosor y el gramaje del papel son términos muy utilizados con frecuencia en una imprenta tradicional y en el mundo de los diseñadores gráficos que trabajan con la impresión de tarjetas, folletos, revistas o libros.
Su uso, en cambio, no es tan común cuando se trata de una imprenta online, es decir, con el diseño de páginas y materiales a ser vistos a través de pantallas de móviles u ordenadores.
Por eso no es de extrañar que entre clientes e incluso algunos diseñadores que se relacionan poco con una imprenta o con la impresión convencional, exista en ocasiones una confusión entre el grosor y el gramaje del papel.
¿Qué son el grosor y el gramaje del papel?
El grosor
El grosor del papel, tal y como su nombre lo indica, se refiere al grueso del material o, en otras palabras, a la distancia que hay entre un lado de la hoja y su revés.
El grosor del papel se mide con un instrumento llamado micrómetro, aunque también es conocido en el mundo de las imprentas como tornillo de Palmer, calibre Palmer, o solo Palmer, (puedes verlo aquí) que toma lecturas de centésimas y milésimas de centímetro, denominadas micras. Mil micras constituyen un milímetro.
Dos hojas de papel pueden tener el mismo grosor y, sin embargo, diferir en el gramaje.
El gramaje del papel
El gramaje tiene que ver con el peso del papel, es decir, con los gramos por metro cuadrado (gr/m2).
Si se dice que una hoja tiene un gramaje de 200 g, lo que están señalando es que un metro cuadrado de esa hoja pesa 200 gramos.
El gramaje se medía con unas balanzas especiales, pero actualmente se hace con balanzas electrónicas muy precisas.
¿Por qué es importante saber del grosor y del gramaje del papel?
Te preguntarás por qué es importante saber sobre el gramaje o el grosor cuando tu trabajo está relacionado usualmente con la impresión online.
Aunque hoy en día gran parte del diseño y las publicaciones se realizan digitalmente, incluyendo libros, periódicos y revistas, es muchísimo lo que se sigue haciendo en papel y utilizando imprentas convencionales.
A diario se imprimen en el mundo miles o millones de toneladas de libros, diarios, folletos, catálogos, cuadernos, agendas, revistas, tarjetas, carteles, etc. Es importante conocer qué tipo de papel te conviene usar en cada uno de esos casos.
Por ejemplo, si vas a imprimir un libro, con un buen tiraje y sin ilustraciones, te conviene entonces un papel de 89 o 90 gramos. Si se trata de una publicación con ilustraciones, como un libro infantil, será mejor que utilices papel entre 135 y 150 gramos.
El gramaje para papel de fotografía oscila entre los 135 y los 300 gramos.
Las portadas de libros se hacen con papel de mayor grosor y gramaje, entre 170 y 300 gramos.
Si vas a trabajar en la impresión de folletos, volantes o trípticos, el gramaje de papel que te conviene usar se encuentra entre los 135 gramos y los 170 gramos.
El papel de 250 gramos se utiliza para separadores (marcapáginas) o como portadas para cuadernos; y los papeles con más de 300 gramos se utilizan para la impresión de tarjetas.